sábado, 4 de junio de 2011

Desde aquellos años te quería decir que podría mentir por la ansiedad de decir la verdad.

.
.
Y hace unos 200-300 años pensé lo mismo,
moría y sonreía por dolores resumidos en microsegundos,
puertas cerradas que asustaban y no lleveban a ningún lugar,
eran para abrir, reirse y cerrarlas,
suspiros y apuros en búsquedas que se repiten
que chocan idiotas con sus mayores,
logros disfrazados de sentido,
fechas que mentimos importantes por ese vacio
que hace 500 años,
1000 años(decime cuantos ceros te complacen),
flotaba en un atardecer
y nos empujaba a otra evasión.
.
.

1 comentario:

Anónimo dijo...

...te miento si te digo que para partir la mentra en dos y chupar algo de verdad reseca, hace falta solo un hachazo...y que así y todo me da alguna señal de fiebre si te apoyo los labios en la frente...algo de verdad habra, el vació esta bien para arrancar,luego, te debería mirar a los ojos y acercarme, abrir la mano e inventar un puñado de pochoclos, por lo menos.