miércoles, 29 de febrero de 2012

Compreventa de basuras deliciosas.

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En un bar, de los tantos que compré y vendí a seres de otro planeta, acercabasé ella con una decena de discos insólitos para la época.
Libros, muchos libros y dibujitos hechos a las apuradas, con lapicera, en papeles olvidados en folios que se ensuciaban de tierra, tirar todo a la puta madre, de que van tantos poemas ?
En aquellos años era como hoy con las diferencias tan aburridas de describir, siempre nos reímos de tirarse un pedo, y que se pierda todo...
Siempre fué importante expresarse y siempre será verdadero que la libertad está en dar sin esperar, que lindo conocer el empacho de la clase media y sobre todo del artista y sus pretensiones.
Casi viajo hasta tus encantos, de colado, como siempre y casi volviéndome con buenas ideas para quedarme sin ellas mismas.
Ahora ella me acerca un mate sencillo, hecho de nidos de colibrí y aquellos pastos que maltratábamos corriendo la pelota.
Mis amigos están asando, yo hago los mandados en aquellas nubes que te colgaste mirando y cuando vuelvo están preocupandosé por los hijos.
Mi hijo es mi genio, mi hija es mi belleza, mi mujer es yo mismo juntando el aire más dulce y entonces todo andaba por acá nomás.
Mis amigos son todo lo divertido que me quiero reír, mi hermano es todo lo artista que puedo percibir y mis afectos están informados de mi amor.
Yo mismo me veo libre de mi insistencia en ser libre, incluso los días de mierda me descubro riéndome del tiempo tan idiota de las preocupaciones.
Los soretes distribuidos entre los acordes, cuesta expresar la relación que llevan mis dos perros, ahí se van las políticas, ahí llegan las miserias, un bollito interesante que masticamos y compartimos.
El tradicional cuidate pero dicho con seriedad, a los ojos, en cualquiera de los tantos bares que compré y vendí a seres de otros planetas.
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1 comentario:

Capulina dijo...

Cuanto más miro la luna pero en silencio y respiro un océano consumido de deseos virtuales y lleno de letras liquidas, más me sumerjo en papel y juego algo prohibido pero que de tan irresistible se evapora y el bollo lo emboco sin mirar hacia atrás.Y es verdad solo la idea vaga de la libertad,no me engaño pero me gusta tanto el infierno como el cielo.