miércoles, 30 de septiembre de 2009

Todo es chichí

Los hijos huelen las mentiras, intuyen las farsas.
Los hijos a veces duelen.....
Duele ver a los hijos dolientes de nuestras luchas,
batallas en busca de satisfacción,
oh, bella noche que caes, nada tengo para vos,
estuve toda mi vida con el pitito rojo,
¿de que se ríen tus estrellas?,
¿donde buscaré mas basura para ilusionar?,
mientras tenemos padres y hermanos,
amigos, compañeros y días libres,
¿es tan importante lograr "que" objetivos?,
¿adonde quedaron los sueños que fueron cumplidos?,
pero toda esta gente que corre gritando,
(no pueden estar todos equivocados),
están siempre con sueños nuevos,
oh, bella vida que desangras mis mas grandes respetos,
están desesperados por darte una utilidad,
por mejorarte, por disfrutarte,
¿puedo quererte así desnuda?,
¿puedo agradecerte porque me saliste así?,
los hijos quieren la libertad, asumen el peligro,
matame vida si les paso mis miedos....
Alegra que no nos den pelota,
están riéndose de aquella poesía,
oh, fea sensación de arte, nada vale nada,
estuve toda la vida cambiando el mundo,
¿de que se ríen esos niños?,
¿porque estas ironías me dan tanta libertad?,
mientras se escriben libros, se actúa,
se pinta, se canta, y se habla.....
¿Que importancia puede tener si te hago esperar?,
¿que puedo lograr si estoy ausente?,
(oye, Manuel, hemos tenido cada padre....),
están siempre con alguna biblia,
oh, bella idea de la felicidad, ojalá se caguen en vos,
ojalá tus ojos se miren al espejo,
se vean, se respeten, se descubran,
"siempre vas a ser perfecto".

2 comentarios:

Noe dijo...

Je, ojalá no tanto.

Grita La Madrid dijo...

Que bueno que está este!!!