viernes, 26 de febrero de 2010

El sutil que descubre su lugar

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Vas a calmarte, vas a creerme,
vas a mezclarte con la belleza,
vas a silenciarte,
vas a cruzar tu infancia y tus historias familiares,
te vas a sentar con tu niñez,
vas a aceptar el fracaso,
pero no vas a irte a ningún lado, vas a caminar las veredas de Olavarría de una punta a la otra, vas a pararte en algunas esquinas porque las verás con otros ojos, creciste puteando por estas calles y su belleza era lo único que te rodeaba, no es una belleza para traer a alguien a verla, pero es tuya y no necesitas explicársela a nadie, no necesita confirmación porque eras vos y solo vos quien estaba por esas calles creciendo, estaba tu barrio, el arroyo y el sufrimiento.......
Centras tu atención en una cara, en una baldosa, en una fila de bloques que tiene una frase pintada con aerosol, se cruzan algunas canciones como música de fondo, cassettes grabados, prestados, olvidados, y la sensación privilegiada de tener tiempo y calma para, ahora sí, prestar atención.
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